Podemos: lleno absoluto en un gran acto en Valencia

Pablo Iglesias e Iñigo Errejón han sido aplaudidos, vitoreados y apoyados por un público entregado y con grandes ganas de cambio político.



Más de 8.000 personas han acudido al Pabellón de la Fuente de San Luis a escuchar a los líderes más carismáticos de Podemos. En palabras de Iñigo Errejón “cada vez se nos quedan pequeños sitios más grandes”.

Pablo Iglesias ha sido muy contundente ante los detractores, a los que se ha referido cuando ha hecho mención a los maletines con billetes de 500 euros, de los que ha dicho que no era Barcenas quien los llenaba, sino grandes constructoras y mafiosos que habían comprado al Partido Popular. También cuando ha preguntado al público si pensaban que se iban a dejar ganar así porque así, haciendo referencia al PP y resto de partidos en peligro. Así como cuando ha citado que van a ser seguir siendo atacados muy duramente a partir de ahora.


También ha repetido, lo que manifestó anoche en la entrevista de la Sexta Noche, que ellos extienden la mano a todo el mundo, que se han puesto en contacto gente de Izquierda Unida, Ciudadanos y de otras fuerzas políticas, para acudir el día 31 de enero a la gran manifestación que tienen prevista en Madrid y que, por supuesto, están encantados que acudan.




Tic, tac: la cuenta atrás ha comenzado

Iñigo Errejón ha sido el primero en mencionar el tic tac, haciendo referencia a la cuenta atrás para el cambio y el fin del poder del PP. Al que ha seguido en su intervención Pablo Iglesias y el público que abarrotaba el recinto. Tic tac, tic tac, tic tac.

Pablo ha mencionado la importancia de las elecciones en Grecia y ha señalado que “esta noche comienza la esperanza en Grecia de la mano de Syrza y ha puesto en marcha la cuenta atrás del PP”.



¿Qué tipo de público ha acudido al acto de Podemos en Valencia? 

Entre las personas presentes esta mañana en Valencia abundaban las de mediana edad, incluso se dejaban ver muchos entrados ya en la tercera, los que se veían llenos de entusiasmo e ilusión.

En general, personas normales, de todos los estatus (de forma aparente) y de todas las edades. Jóvenes, entre los que abundaban no precisamente los denominados “perroflautas” y que intercambiaban opiniones con personas mayores, en un ambiente de confraternización entre distintas generaciones muy envidiable.


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