Ejercicios faciales para conseguir belleza y relajación


Con algunos ejercicios específicos de estiramiento en los músculos faciales, más una respiración acompasada, puedes rejuvenecer y aprender a relajarte.

Respiración previa (Kcam)


Trabajar los músculos del rostro es importante para reactivarlos. Cuando no se utilizan, alguno de ellos puede llegar a atrofiarse. Por eso, ejercitar la cara, cráneo y cuello permite recuperar la firmeza y la elasticidad pérdidas al cabo de los años.

Técnicas de belleza basadas en el yoga

Para conseguir lo dicho, es conveniente ser constantes en su práctica. Hay que realizarlas un mínimo de tres veces por semana para que puedan verse resultados. Incluso, si es posible, hacerlo más a menudo.

El yoga facial es una técnica construida a base de gestos, que va desde sonrisas y muecas hasta distintos tipos de masajes en músculos específicos. El Instituto Mexicano del Yoga recomienda realizar estos ejercicios antes de acostarse o al levantarse por la mañana, cuando uno está más relajado.

Estas técnicas fortalecen la fibras de la piel, de ese modo puedes sentir una dermis más fortalecida y revitalizada. Ayudan a reafirmar los rasgos, atenúan la aparición de arrugas y líneas de expresión. Contribuyen a mejorar la regeneración celular y la circulación sanguínea de la zona, aportando oxígeno a los tejidos.
Es muy importante que nos tomemos un tiempo para nosotros/as, en el que no haya que preocuparse de nada más. Desconectar el teléfono, ponernos una buena música relajante, alguna vela encendida, incienso, y cualquier cosa que nos ayude a serenarnos y encontrarnos en paz.

Comencemos sin prisas, escuchándonos por dentro, notando las sensaciones en cada paso. Disfrutando del momento y sintiéndolo.


Energía para la belleza y la relajación
Al mismo tiempo que practicamos este tipo de ejercicios, debemos añadir los beneficios de la energía. Al finalizar cada uno de ellos, debemos frotar ambas manos durante unos segundos y cuando notemos el calor propio de la energía brotar de las palmas, depositarlas en las zonas tratadas dejando que la energía fluya por toda la piel. De esta forma reforzamos el trabajo realizado y nos ayuda a relajarnos más.



Ejercicios previos anti edad para preparar los músculos 
  • Gira la cabeza hacía la derecha, hasta donde puedas. Toma aire en el centro y expúlsalo al ir girando. Haz lo mismo hacia el otro lado. Repite diez veces y relaja.
  • Realiza círculos suaves con el cuello. Inhala al subir la cabeza y exhala lentamente al bajarla. Realiza diez círculos hacia un lado y diez en sentido contrario.
  • Cierra los ojos, respira suavemente y ábrelos lentamente. Sin mover la frente, imagina un reloj, mueve los ojos hacia las 12, luego a las 3, a las 6, a las 9 y a las 12. Repite el giro diez veces y luego en sentido contrario diez veces más.


 
Belleza facial en cinco pasos
  1. Abre los ojos como si estuvieras sorprendida, con cuidado de no arrugar el entrecejo y la frente. Fija tu atención en un punto durante unos diez segundos. Repítelo cinco veces y relaja.
  2. Llena de aire tus mejillas y pasa el aire de una a otra, unas cinco o seis veces o hasta quedar sin aire. Repite unas cinco veces y relaja.
  3. Con los párpados cerrados masajea con los dedos índice y corazón los globos oculares. Luego abres los ojos y ejerces suaves toques con las yemas de los dedos sobre el arco de las cejas a lo largo del hueso de las órbitas oculares.
  4. Los dedos índices van presionando en la zona donde la nariz se une a la frente y en las cuencas. Los ojos permanecen cerrados y el tiempo de presión y de descanso se establece casi a placer. Notarás enseguida que este simple gesto te transmite una relajación profunda. Transcurrido un tiempo razonable baja los mismos dedos a la altura de las aletas de la nariz y realiza frotaciones en círculos.
  5. Pon las manos cruzadas en el pecho, lleva el mentón hacia arriba, lo más tenso posible. Gira la cabeza hacia los dos lados, manteniendo la tensión. Repite diez veces hacia ambos lados.


La importancia de la relajación y la respiración
La base del yoga es la respiración mucho antes que los estiramientos. Así pues, en el caso del yoga facial igualmente es muy beneficioso. Respirar bien trae muchos beneficios, como calmar la ansiedad, oxigenar la piel y contactar con tu interior. Por tanto, es muy importante que cuando te pongas a realizar el yoga facial, dediques unos minutos, al principio y al final, a la relajación y respiración.
Relajación (dMap Travel Guide)


Antes de comenzar te sirve para relajar las tensiones, predisponiendo tus músculos a trabajar mejor. Te conectas interiormente e intentas olvidar las preocupaciones y pensamientos negativos. Te haces el propósito de dedicar ese tiempo para ti, para tu belleza y bienestar.
Al finalizar, te ayuda a fortalecer el efecto de todos los ejercicios, relajándolos todavía más, oxigenándote y llenándote de energía.


Esta técnica de belleza debería de ser una rutina más para embellecernos, relajarnos y olvidarnos de los problemas cotidianos, ayudándonos a vivir una existencia mucho más placentera.


Lola Sancho Cabrera

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